Cometogrow — Iluminación LED para cultivos

Mantenimiento y limpieza de luminarias

La acumulación de polvo, tierra, pulverizaciones foliares y pesticidas puede ensuciar rápidamente las luces utilizadas en el cultivo. Si no realizas planes de mantenimiento, esto no solo resultará en un desperdicio de dinero, sino que también pondrá en riesgo la salud de las luces y de las plantas que dependen de ellas.

Razones por las que
deberías realizar el
mantenimiento de luminarias:

Funcionamiento: Mantener las luces de cultivo limpias y libres de polvo y suciedad no solo es beneficioso para tus plantas, sino también para tu seguridad. 

Aunque las luces LED tienen una vida útil prolongada, la suciedad puede afectar su flujo luminoso y acortar su vida útil. Mantenerlas limpias ayuda a prevenir posibles fallos en su funcionamiento.

Rendimiento: El rendimiento óptimo de las luces de cultivo están directamente relacionados con su limpieza. Si permites que se ensucien, no solo pueden calentarse en exceso, sino que también pierden eficiencia en la conversión de energía en luz. 

Inversión a largo plazo: Si no limpias regularmente tus luces, llegará un momento en el que tendrás que hacerlo o incluso reemplazarlas. La limpieza regular lleva poco tiempo, pero si la postergas y la suciedad se acumula, requerirá más esfuerzo y podría dañar los componentes de las luces.

Cómo limpiar las luces
LED de cultivo

Seguridad

Siempre asegúrate de desconectar y dejar enfriar a temperatura ambiente cualquier parte del aparato de iluminación antes de proceder a su limpieza.

Recomendaciones de fábrica

Es importante consultar las recomendaciones del fabricante para cada lámpara de cultivo, ya que estas pueden tener instrucciones específicas de limpieza que deben ser respetadas para un mantenimiento correctivo.

En el caso de los productos CTG, incorporamos policarbonato para proteger los diodos de suciedad y evitar que se rompan por golpe. 

Tanto el policarbonato como el metacrilato pueden perder sus características de transmisión de luz si se limpian con alcohol isopropílico.

Por eso, te recomendamos seguir
estos consejos de limpieza para
tus luminarias CTG:

1.Para limpiar la zona del policarbonato, utiliza un paño de microfibra, agua y jabón suave. 

De esta manera, podrás eliminar el polvo y mantener la claridad en tu iluminación.

2. En cambio, para la zona del aluminio disipador, es seguro utilizar alcohol isopropílico y también un paño suave. Esto te permitirá eliminar cualquier mancha o residuo sin comprometer el rendimiento de tu luminaria.

3. Para limpiar la fuente de alimentación (balastro electrónico) utiliza un paño seco para eliminar el polvo que se puede acumular en el mismo chasis disipador. Si dispones de un pequeño compresor, se recomienda soplar con aire a presión a una distancia de 15-20cm para retirar todo el polvo. De esta manera ayudaremos a disipar el calor que emite la fuente de alimentación más eficientemente.

*Recuerda que un mantenimiento adecuado prolongará la vida útil de tus productos y garantizará un rendimiento óptimo. Si tienes alguna pregunta o necesitas más recomendaciones sobre el cuidado de tus luminarias, no dudes en contactarnos.

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